Como optómetra y empresario de las comunicaciones, has tenido una importante trayectoria. ¿Cómo fue el inicio de Grupo Franja, y qué desafíos enfrentaste para convertirlo en el referente que es hoy en América Latina?

J.O.: Iniciamos como un periódico estudiantil, en un acto de rebeldía académica y cultural en tercer semestre de Optometría en La Salle. Publicamos cuanto se nos ocurrió bajo una propuesta culta, atrevida y divertida. Yo me enamoré del proyecto FRANJA VISUAL, fui el único del grupo que siguió y desde hace 38 años nunca hemos dejado de generar información para mi comunidad salud visual. Hoy llegamos a más de 100 mil personas a través de 18 plataformas informativas.

Muchos desafíos hemos enfrentado, producir información útil y permanente, llegar a todo el continente, abrir empresa y lograr la credibilidad de la industria de Estados Unidos, superar las embates de las economías latinas y que este proyecto, cultural, fuera una actividad sostenible. Estos y otros tantos han sido superados.

Grupo Franja no solo informa, sino que conecta a profesionales y empresas del sector de la Salud Visual. ¿Cómo ves la evolución del rubro en América Latina durante los más de 35 años que llevas trabajando en el medio?

J.O.: Cuando iniciamos Franja en 1.986 registramos una evolución lenta. El continente mantenía una tendencia similar, lentes de vidrio, LC de PMMA, bifocales y equipos de diagnóstico manuales. Había muy pocos optómetras, oftalmólogos, ópticas y programas de formación en Optometría. Las agremiaciones eran pequeñas y había presencia de empirismo en la mayoría de los países. Tampoco había tantas pandemias oculares y los grandes grupos empresariales no se habían conformado. En ese entorno nacimos, el periódico se convirtió en revista, empezamos a circular en otros países y a registrar lo que pasaba en el continente y el mundo. Y le dimos espacio a la producción de contenidos de los profesionales latinos.

Hacia mediados de los 90’s sentimos una fuerte evolución, la Optometría de América Latina cobraba vida y presencia. Colombia fue fundamental, los optómetras colombianos con un programa de formación de 5 años y un modelo de Optometría americana, sembramos semillas como conferencistas, clínicos, asesores, creadores y directores de programas académicos. Al mismo tiempo, los latinos acogimos con mayor decisión productos y tecnología que en otras regiones del mundo eran comunes, registramos el cambio de lentes de vidrio a plástico, el crecimiento de los índices de refracción, la gran presencia de los LC blandos y el ingreso de los LC especiales. La tecnología automatizada para diagnóstico ocular tomo fuerza y cada día nos sorprende más, se inició una interesante apertura de nuevos programas de Optometría en Colombia y esto impacto más América Latina. Con la academia, los gremios se fortalecieron y con la suma de estos, la intención de lograr el reconocimiento legal de la Optometría en sus países. Una lucha que no hemos dejado de evidenciar.

Hemos registrado una fuerte evolución en todas las áreas, empresas empezaron a crecer, empresas de LC compraban otras, empresas de lentes oftálmicos se fusionaron y abrían nuevos espacios, las farmacéuticas hacían lo mismo, el mundo empresarial, al mismo tiempo, se hacía más grande y pequeño. Pues pocas empresas, ahora incluían otras empresas y muchas marcas, así como más empresas latinas independientes eran creadas. Los laboratorios ópticos se convirtieron en grandes empresas, su evolución ha sido impresionante y nuevos modelos de negocio presencial y digital se tomaron el sector.

En conclusión, ¡hemos evolucionado en todo! Y apenas inicia el verdadero potencial de la Optometría en el continente.

El evento FRANJA se ha convertido en un punto de encuentro clave para la comunidad de salud visual. ¿Qué crees que lo diferencia de otros eventos del sector y cómo ha contribuido a fortalecer la industria en la región?

J.O.: La capacitación es el arma más poderosa para estimular el crecimiento de la comunidad y “la comunidad salud visual somos todos” los que participamos en esta, industria, profesionales de la visión, asesores y administradores. Así que nos concentramos en ofrecer el mejor contenido que enriqueciera su labor. También establecimos un espacio amplio en el que la integración, la academia y los negocios se facilitan. Creamos una propuesta de contenidos simultáneos con alta tecnología de producción de audio, video, pantallas, etc.

Nuestra contribución nos tiene muy orgullosos. Hemos conectado a América Latina, reunimos más de 4.000 personas del continente y más de 100 empresas, es una cita para su capacitación, negocios e integración. Todo esto es trasladado en sus regiones, con sus compañeros y por supuesto, en su práctica diaria.

Recientemente has lanzado el Programa de Educación Continua para Laboratorios Ópticos. ¿Qué te motivó a crear esta iniciativa y cómo crees que puede impactar el desarrollo del sector óptico en América Latina?

J.O.: Los laboratorios ópticos son fundamentales en el éxito de nuestra actividad profesional, su trabajo impacta directamente nuestra labor y la vida de la población. También son el pulmón económico del sector. En nuestro análisis de la comunidad, evidenciamos la falta de capacitación que tenía su personal. Así que hace 14 años iniciamos actividades pensadas en ellos, creamos contenidos especiales en cada edición de FRANJA VISUAL, en nuestros programas de radio, siempre, cada semana, había un espacio para el laboratorio, luego, hace 12 años, dentro de nuestro congreso, creamos el simposio de laboratorios ópticos, la estrategia continuó con la creación del programa Tallando Conceptos. Y finalmente, como resultado de la suma de estos aspectos, hace 4 años iniciamos el Programa de Educación Continua para Laboratorios. Antes de salir al aire, nos tomó 3 años, junto con el ingeniero Julio Jinesta, construir el programa y organizar el equipo de docentes.

El impacto en el mercado ha sido grande, hemos recibido reportes de propietarios y jefes de laboratorios sobre el cambio en la labor de nuestros estudiantes. El modelo ha funcionado en la mayoría, en aquellos que siguen el modelo, pues todo tienen la posibilidad de practicar en sus laboratorios, así que nuestros más de 250 egresados influyen en su labor y en sus compañeros. Los profesores son personas que han estado al frente de los laboratorios por años, logramos ubicar a los expertos en cada área del laboratorio, con un nivel de conocimiento muy alto, además de transmitir conocimientos, están enamorados de la actividad. Así que el impacto es alto.

Además de tus logros como comunicador, también has creado conceptos de ópticas que funcionan con éxito. ¿Qué crees que necesitan las ópticas hoy para adaptarse a los cambios tecnológicos y las nuevas demandas de los pacientes?

J.O.: La Optometría es una profesión fundamental en el desarrollo del individuo porque los ojos permiten al cerebro comandar el sistema entero. Y cada vez más, la población tiene más problemas con sus ojos. Un altísimo porcentaje tiene defectos refractivos, ojo seco, alergias, cataratas, problemas de binocularidad, problemas de salud general que alteran el sistema visual y me quedo corto.

La población latina necesita que los ayudemos. Nuestra propuesta debe ser muy clínica para mantener su salud ocular, muy estética porque trabajamos con su rostro y ofrecer los mejores productos y servicios que estén al alcance de su presupuesto, porque en nuestra labor todo debe ser de alta precisión, de alta calidad para facilitar el desempeño humano.

Finalmente, GRACIAS por su interés en nuestra propuesta. Este proyecto ha sido la motivación de mi vida. Es muy interesante, porque al generarme una motivación tal alta, nunca dejan de surgir ideas para lograr esta misión de vida.

Reseña

J.O. es optómetra de la Universidad de La Salle. Durante su vida como estudiante universitario inició la empresa que durante más de 35 años se ha dedicado a informar el sector salud visual de América Latina, Grupo Franja.

En su vida como profesional de la Optometría se ha desempeñado como clínico, docente, conferencista internacional, empresario, gerente de una empresa multinacional y periodista.

Su labor incluye la creación y dirección de los medios de información, en el área de la salud visual, más reconocidos de América Latina. El evento FRANJA, el punto de encuentro de la comunidad salud visual de América Latina reúne más de 3 mil personas y participación más de 80 empresas del mundo.

Los contenidos que ha desarrollado junto con su equipo de trabajo llegan permanentemente a más de 100 mil personas.

Su experiencia incluye la creación de un concepto de ópticas que en la actualidad funcionan y hacen parte de su trabajo dentro del gremio.

Ahora, su más reciente emprendimiento, ha sido crear el Programa de Educación Continua para Laboratorios Ópticos con el objetivo de estimular el crecimiento del sector óptico del continente.